va de moderno con... grupo salvaje

Sí, estoy en un bar, es un bar en malasaña, mítico barrio de progres, indies y modernos en la ciudad de Madrid, la rockola calla y da paso al grupo de la noche: grupo salvaje, quienes en un perfecto español dan la bienvenida al público asistente y se aprestan a defender su último disco, el segundo: Aquí hay dragones; tiempo después investigo en su página el origen del nombre del albúm y se refiere a una expresión utilizada por los primeros cartógrafos para designar a las zonas inexploradas de la tierra. Comienzan a sonar los primeros acordes de a dissapointed man y de golpe me regresan a Nashville o a alguna otra ciudad de las más arraigada american song, indiscutibles púpilos de johnny cash o scott walker, pero como en las buenas películas con una primera secuencia no es suficiente, así que dejo mi cerveza y me dedico a Grupo Salvaje, me entrego a su sonido mientras cada una de sus canciones caén, una a una, y la espiral juega hasta el infinito con el baggage musical que se ve, dominan: desde el blues más aspero como lo es The soldier and the death blues hasta el entierro de bakunin, digna aprendiz del tom waits mule variations, con Scott Arms entregan un merecido homenaje a esa música sórdida, obscura, que te hace prender la luz si es que estás sólo, a lo nick cave o joy division, y así sigue hasta que el trance termina, y es aquí donde me doy cuenta de que nunca he estado en madrid ni mucho menos en algún bar perdido en Nashville...

País:España

Discográfica: Acuarela